18 de julio de 2007

Historia de la Renovación Carismática

1.La Renovación Carismática Católica nace a impulso del impulso del Espíritu Santo que le dio vida. Surge de la expectativa de un Pentecostés actual, como una respuesta, entre otras muchas, a al acción del Espíritu Santo para Renovar la Iglesia de Cristo.

La Renovación Carismática Católica asimismo sigue el pensamiento y los deseos del Papa Juan XXIII en el Concilio Vaticano II: "Renueva en nuestros tiempos los prodigios como de un nuevo Pentecostés, y concede que la Iglesia Santa, reunida en una unánime y más intensa oración torno a María, Madre de Jesús y guiada por Pedro, propague el Reino del Salvador divino, que es Reino de Verdad, de Justicia, de Amor y de Paz".

2. Tal renovación se verifica en las personas, que se ven transformadas interiormente gracia a la acción el Espíritu Santo y sus manifestaciones, sintiéndose nuevas criaturas incorporadas a la misión de la Iglesia.

La Renovación Carismática Católica, es una corriente espiritual entroncada en la Iglesia postconciliar y por tanto sometida al pastoreo y al discernimiento de la Iglesia Católica.

Como corriente espiritual, la Renovación Carismática Católica se distingue por una dócil escucha y guía del Espíritu Santo, siguiendo la orientación de S. Pablo (1 Tes 5, 19-21); y teniendo en cuenta el Concilio Vaticano II:" y además, el juicio de su autenticidad y e su ejercicio razonable, pertenece a quien tiene la autoridad en la Iglesia, a los cales compete ante todo, no sofocar el Espíritu, sino probarlo todo y retener lo que es bueno" (LG 12).


Los Carismas Del Espíritu Santo


. Con la nueva efusión del Espíritu Santo, éste se manifiesta en diversidad de carismas. " En cuanto a los dones, no quiero, hermanos, que estéis en la ignorancia". (1 co 12,1).

La Renovación Carismática Católica asume vivencialmente la teología bíblica de San Pablo acerca de los carismas según se constata en las cartas 1 Co 12,; 14; 14; Rom 12 y Ef 4.

. La Renovación Carismática Católica, teniendo muy presentes las enseñanzas del Concilio Vaticano II y viviéndolas hechas vida en si misma, no solo asume doctrinalmente todos los carismas sino que se experimentan gozosamente en las personas para el provecho común.

El Espíritu Santo no solo santifica y dirige el Pueblo de Dios mediante los sacramentos y ministerios que adornan con las virtudes, sino que también reparte gracias especialmente entre los fieles de cualquier condición "distribuyendo a cada uno según quiere" ( 1 Co 12,11), con los que les hace aptos y prontos para ejercer las diversas obras para la renovación y mayor edificación de la Iglesia.

. Estos carismas distribuidos entre los diversos miembros, sirven para edificación de grupo de oración, de la comunidad, de la Iglesia.


Siguiendo las enseñanzas y deseos del Papa Juan Pablo II, la evangelización será...

"Nueva" porque estamos en un momento nuevo y también en un nuevo Pentecostés.

"Nueva" en su ardor, por el fuego renovador y por el poder del Espíritu Santo.

"Nueva" en sus métodos, como los que utilizó Jesús: autoridad, sabiduría, poder

mesiánico, mostrando las Escrituras, los apóstoles llevaban a los que se

convertían a un encuentro con Jesús.

"Nueva" en su expresión, respondiendo a las necesidades de este mundo actual, con los

medios disponibles y sobre todo llenos del amor de Cristo.